ELECCIONES CATALANAS

Hoy ha sido el día de las elecciones catalanas. Esta vez he podido votar sin que me den ningún empujón ni que me sacarán ningún ojo.

Cómo tengo el colegio electoral al lado de casa de mi madre he aprovechado para ir a comer con ella. Cualquier momento con mi madre es digno de recordar . Ella es una persona extraordinaria. Me fascina la capacidad que tiene de mostrar un gusto y delicadeza  exquisitas y un segundo después ser más bruta que un arao.

Hoy he quedado con ella para comer. Ha hecho de primero crema de calabaza y revoltijo de setas con espárragos y bacalao.

Ha empezado diciendo: mira esta crema no la has comido en tu vida porque aquí lo que se compra en cualquier mercado es todo mierda. Nadie hace una crema igual Es q es una cosa exquisita y exclusiva. Estoy escuchandola divertida por su altivez y justo en ese momento veo como se levanta coje el abridor del vino y se dispone a arrancar el tapón de corcho a lo bruto  sin quitar  la envoltura metálica. Rápidamente  le quito de las manos el abridor y decido hacerlo yo.

Entre plato y plato hablamos de la política y me explica que a ella le encanta el programa del al rojo vivo Me dice que es super imparcial y que ellos sí que explican las cosas como són. ante esta afirmación le pregunto qué cadena según su criterio no es imparcial y me dice: pues ahora estoy viendo bastante tv3 porque la estoy vigilando a ver si manipulan la verdad.

De segundo hay revoltillo de setas .Yo que soy una provocadora nata  y ante su eterna insistencia a que corrobores lo exclusivo y bueno que está la comida contesto: hombre, está bien pero no me mata. Mi madre al oírlo empieza a sacar espumarajos blancos por la boca y la cabeza se le empieza a girar unos grados a la izquierda.

Al ver la gravedad de las consecuencias de mis palabras las retiro antes que el daño sea irreparable.

Al recuperar su estado normal me dice: mira, sabes lo que ha pasado? He cometido un error imperdonable, un revoltillo se tiene que preparar y comer directamente y este se ha puesto frío y se ha endurecido. Cualquier buen cocinero lo sabe. Yo le digo: bueno, no has pasado la prueba inicial ahora te tocará superar la prueba de exteriores.